terça-feira, 24 de fevereiro de 2009

Calor


En momentos de gran torpeza y fiebres iconoclastas me gustaría caer, estrellarme en una ola de calor. No busco evaporarme, tan solo vibrar con las radiaciones solares, echarme la manta a la cabeza y acabar en un lugar a mil kilómetros de la civilización. Soportaría torbellinos meridianos, rastrearía inconsciencias en fiebres de dunas, me cardaría el pelo con sueños de arena y dormiría bajo redes de estrellas. Si pudiera.

Hoy he visto una imagen en el anuncio de una farmacia. Era nada ... un cielo azul, límpido, eléctrico, y una chica tumbada en una tabla. Y me trasladé allí. Al malecón.

Y Jane Fonda tirándose en salto mortal desde la tabla para conseguir la aprobación de su padre, bajo la mirada triste y tierna de Katherine Hepburn en El Estanque Dorado ...

Mis ideas no son del todo asumibles, son más bien una descarga de fluidos imprecisos y revelatorios que asumen formas distintas acorde al giro de la rosa de los vientos. Apenas revelo nada porque me asomo a todo; lucho con la grave totalidad de los desperfectos como aparejos, y no es sencillo.

Respiro haces de luces y tropiezos, retengo el aliento cada dos pasos. Emprendo procesos inacabados, utilizo llaves maestras incompletas, contrariadas e inservibles. Me obligas a levantarme y callar diariamente. Me obligas a reaccionar y saltarme los protocolos de la lástima. Me invitas a recorrer constantes embites contra el rompeolas, para ser una corredora de fondo en una línea de playa extranjera.

El tobogán bipolar es una llamarada de fuego injusta sobre mi carne débil. Prefiero las llamaradas solares. El sol me seduce, me hace sentirme bien, me sana, me cuida. Menudo bellezón.

3 comentários:

  1. Una reflexión por si consigo arrancarte una sonrisa (aunque sea muy simplona): lo mejor del bipolar -etimológicamente hablando- es que está en los dos polos: el sur y el norte. En el sur del Hemisferio Norte hace sol. En el Sur del Hemisferio Sur, hace sol, pero frío. Y en el Norte del Hemisferio Norte, hace frío, y en el del Sur, calor. En definitiva, yo soy del norte, pero vivo en el sur y cuando sale el sol, me recargo por dentro para pasar el invierno mental (ese lleno de reflexiones, hermetismo, de subidas y bajadas). Entre tanto norte y sur, mi devoción por el centro (Madrid). Besos de miércoles, anónima. ;o)

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  2. Uhmmm...A mi me encanta el norte y el sur,quizás por que mi sangre es del sur,pero mi necesidad fisica y mental es del norte...No se si me entiendes...A veces dejo salir a mi hermana.

    Muchos megabesos linda Paloma!!.

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  3. Afortunadamente que somos seres complejos ;o) En cuanto a esa búsqueda del equilibrio, en mi caso, es una cuestión de visión: más que la botella semillena o semivacía la veo por la mitad; el centro (Madrid) nostalgia de un tiempo y etapa, vital, vivida allí (siempre que puedo, subo-bajo -dependiendo si estoy en el sur o el norte- por una mera necesidad (Madrid me aporta esa sensación de poder deambular por sus calles, perderme mirando los edificios, observando el bullicio de la gente y la vorágine de la ciudad). Y como remate, hubo un tiempo en que me quise tatuar la palabra 'equilibrio'.
    Por último, comparto esa necesidad del norte, pero el sur engancha.
    besos, semicalurosos (empiezan a subir las temperaturas).

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