Para escribir con la tinta de la sangre de tus sentimientos tienes que ser valiente y abrir las heridas del alma y aquéllas resguardadas bajo la piel. Ser honesta contigo misma y recrear las aristas y los embistes del dolor en cámara lenta para poder declamar sus cacofonías, los efectos de la crueldad de sus armas arrojadizas en el esternón, sus inconsistencias, sus pérdidas, sus irreversibles.
Busco intersecciones para encajarme dentro y prosperar. Tengo la agenda llena de silencios inválidos, carentes de control. No he escrito lo suficiente. Sus hojas sudan porque a pesar del escaso peso de mi escritura reciente está invadida de sentimientos que he de liberar. Son los trazos invisibles de témperas en los pinceles tibios de mi imaginación, los enredos triviales de mi inconsciencia, los olores reverdecidos que inspiro en el aire y busco desesperadamente, de forma imbatible. La valentía es un haz de sensaciones deshechas de belleza, cuadros enteros arrebolados e inmensos, irresistibles cruces e imprecisiones.
Para empezar: la foto parece un San Sebastián asaetado en versión moderna (al menos espero que no te coloques en un mástil para recibir flechas de inspiración y demás...salvo si en vez de flechas recibes besos ;o) .
ResponderExcluirSiguiendo: más allá de mis días ausentes por saturación de trabajo, de tus dos-tres días ausente y de que tus últimos escritos, visualmente (sólo visualmente) han sido breves, ¿qué quieres que te diga? a poquito que escribas, aunque sean dos líneas, nos llenas tanto (bueno, aquí hablo por mi misma) que cuando entro en tu blog y veo varios textos me invade la emoción. Y en cuanto a tu 'tetris' interno de "búsqueda de intersecciones para encajarte dentro y prosperar"..si necesitas visiones externas de huecos invisibles donde encajar...sólo tienes que silbar.
besos, Anónima ;o)
Desde el jueves estuve atrapada en la vorágine laboral. Esa que invade más horas de las que debiera y se vale del hecho de que han dado con una responsable (que no sabe decir 'no') para ocupar más tiempo del que me hubiera gustado. Sólo decirte que he escuchado tu silbido pero en vez de responder sin más, movida por la inercia y el cansancio, prefiero responderte con la mente algo más lúcida (una cuestión de respeto a ese 'abrirte' a nosotros). Besos guapa. Anónima ;o)
ResponderExcluirTienes razón. Debo descansar o, mejor aún, debo regalarme días de descanso. Con un día o dos me sirve, sólo tienen que ser días en los que mi cuerpo se vuelva primario y yo responda a su llamada independientemente de la hora que sea y el momento que sea. Pero ¿por qué algo me dice que tú también deberías descansar? más besoss, Anónima ;o)
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