quarta-feira, 27 de agosto de 2008

Un verano sin Torremolinos

¿Quién lo iba a decir? con lo me gusta a mí Torre, Torremolinos que este verano no dejaría ver mis chanclas de dedo por allí. Y es que yo en La Nogalera, como dice un amigo, soy una antigua. Aunque bueno, después de 8 veranos ininterrumpidos de escapada malagueña quizá éste sea el primero que me ausento, pero aún no ha terminado el verano.

Anoche hablé con un amigo dice que está mal, enfadado con el mundo, con cara de divorciado con la vida. Que no liga y siente que la gente le rechaza. Él sigue siendo el mismo hombretón, alto, de ojos verdes y cara de pillo, pero ya no transmite nada interesante con esa mirada. No despierta nada. No da ese buen rollo y morbo de hace 6 veranos.

Piensa que se ha hecho mayor y que ya no gusta. No se da cuenta de que todos hemos cumplido años.

Amigamia, bienvenida a mi programa. Dora, gran conocedora de la teoría, le comentó dos posibles razones de esta situación. 1) Las amistades. Sale solo o con su amigo Jose, es decir, solo. Alguien que ves cada fin de semana, durante varios años, purulando por los locales solo, sin risas a su alrededor y tal... hmmm...

2) Si tienes 30 años y te atrae la gente maś joven que tú, olé, gustos para todos. Si a los 30 te gustaba Do que tenía 24, perfecto. Si a los 37 sigues buscando Do's, de 24 (aspecto que me ha reconocido). Evidentemente serás invisible para ellos, pero no porque te rechacen, sino porque no estás en su punto de mira.
Supongo que es el momento en que aconsejas fijarse en otras cosas, no sólo en el físico. Porque cuando tienes 58 y sigues pretendiendo a los de 24, no es que vayas a ser invisible, sino que podría ser patético.Pero caris, es muy fácil aconsejar, y una cosa es la teoría.

Le pregunté que estos post-adolescentes ¿qué le aportan? "Problemas" fue su respuesta.

Um comentário: