segunda-feira, 8 de setembro de 2008

Me da igual lo que digas: eres una mierda

Así termino hablándole al ordenador cuando me lanza mensajes de error indescifrables tras horas y horas de trabajo extenuante.

La verdad es que a veces pienso que no podría tener una pareja porque el tiempo que le dedico a mis proyectos es tremendo: días y días interminables.

Tengo lo más parecido a una pequeña familia en mi casa. De mis dos hijos uno de ellos, el Macintosh, es dócil y no me suele dar problemas, aunque cada vez que lo enciendo me sale un error gráfico, pero bueno. Sé que lo solucionaré en cuanto me llegue el paquetito de eBay con la tarjeta gráfica legacy que necesito con el procesador G4 a 1Ghz que le he empuñado a mi apuesto G3 del 1998. Este ordenador lleva conmigo toda la vida y es el que he utilizado para todas mis pelis. Recientemente ha sufrido un total make over, pero la carcasa sigue siendo la misma y los archivos y hasta algún disco duro perduran. Es normal que sepas los defectos de tus hijos, sobre todo los más tranquilos porque si no te pueden dar un susto en cualquier momento.

En el Mac ando montando el corto y no me termino de fiar mucho. Tengo la sospecha de que en el momento crucial en el que esté terminando la película y haya bordado el sonido y la imagen con el algodón que no engaña me traicionará en plan navajada en la espalda. Me estoy cubriendo la retaguardia dentro de lo posible haciendo copias de seguridad del proyecto, pero si al ordenador le da la gana de irse a la porra y ahí muy buenas lo hará y yo tendré que emprender casi todo el camino de nuevo. Supongo que es como todo: nunca tienes seguridad absoluta sobre nada.

El PC sin embargo es mi caballo de Troya. Trabajo constantemente con él para absolutamente todo: compras, lecturas, investigaciones varias, conectarme con el mundo exterior e interior, y últimamente me está fastidiando con algunos problemillas. Sé que lo estoy explotando con tanta descarga de esto y lo otro, y que debería coger un buen disco duro y hacer una copia de seguridad en condiciones porque si no cuando se me vaya a la porra me pillará en bragas. ¿Cuánto tiempo tengo que pasarme con él? Que si arreglas esto o lo otro ... es como un proyecto que da de sí hasta el infinito.

Algún día tendré que dejar de lado mi vida cibernética de mujer biónica y salir más a tomar el aire. Aunque la mayoría del tiempo se me pasa leyendo o trabajando en mis proyectos ¿Cómo puedo explicar eso a otra persona?

Um comentário:

  1. Así tal cual como escribes lo estas explicando de maravilla. Hay que aprender a respaldar todo en la vida partiendo por las emociones y lo material hasta el ocio y los escritos o que se yo... Proyectos? que proyectos te traes? pues la vida cibernetica mantiene gran parte del tiempo... podemos estar pensando en algo y los minutos van avanzando como segundos... bueno, que estes super, espero leerte nuevamente :)

    Un beso

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