domingo, 25 de maio de 2008

Noches de corriente alterna


Me gustaría poder irme a dormir esta noche con la impresión de haber conquistado cierta paz, cierto verdor en la oquedad. Tal vez se trate tan sólo de mantener el nivel de corriente o intensidad para que no se distraiga ninguna emoción con ansias de disparidad. Voy a encontrarme con la almohada con la cabeza llena de preguntas: ¿qué significado ha tenido el día de hoy? ¿Qué podré hacer mañana con lo aprendido/des-aprendido? Hoy es una noche de preguntas y desde aquí no puedo ver las estrellas para que me orienten o me hipnoticen.

Hoy ha sido un día en solitario y con ganas de correr, de no estar, de tomar un día libre y que yo misma me pregunte dónde he ido. No podía cumplir, había perdido la orientación y mi gravitas y mi cuerpo andaba necesitado de que mi mente reaccionara para motivarle e imbuirle de solidez. En ocasiones he conseguido centrarme pero en general la brújula estaba imantada.

Hoy ha sido un día de corriente alterna y en el fondo no debería temer la noche, porque al dar descanso a mi mente tal vez fructifiquen estos anhelos que bullen galopantes con ansias de materializarse.

Nenhum comentário:

Postar um comentário