sábado, 29 de maio de 2010

Instrucciones de uso

-Cómase una de estas gominolas cada vez que tenga ganas irrefrenables de dar o recibir un beso o un mordisco.

-El beso, en su sabor más más dulce, provendrá de mis labios e irá directo al corazón.

-¡Cuidado! porque el exceso de azúcar o ñoñería puede sentarle mal y envolverle en una nuebe de color de rosa.
Cariño, saboréalas.

Ha pasado casi un mes desde mi cumple y aún llegan regalos de amigas que están fuera de Madrid.

Que nunca me falte tu azúcar, guapa. Muchas gracias.


2 comentários:

  1. Cariño nunca te faltará. Un besito, ya sabes que te quiero

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  2. Pues yo se de uno que no va a poder comer demasiadas, aunque, por las dejaremos por si me baja el azúcar no?? Y mira, si no un aliento fresco... por lo menos con sabor a gominolas.

    Bicos

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